Por: Lic. Alexander Rafael Romero Mendoza
Todo
sistema democrático que se precie de serlo funciona con un equilibrio perfecto
entre GOBIERNO y OPOSICION, lamentablemente en regímenes como el venezolano,
antes que cualquier otra acción estará la de destruir y acabar con la oposición
tratando de pasmar todo intento de surgimiento de una alternativa que le
permita a los electores poder comparar y decidir en cualquier momento un cambio
de gobierno.
La
llegada de Hugo Chávez no solo al gobierno sino a liderar las encuestas a
partir de mediados del año electoral 1998, obligó a los dos principales
partidos de oposición (AD y COPEI) a unirse en torno a la candidatura de Salas
Romer en aquel momento, para evitar el triunfo del candidato del Polo Patriótico.
Como era lógico, que una unidad para derrotar a un proyecto y no para conformar
un proyecto arrojó el resultado esperado que fue el primer rotundo fracaso de
la oposición venezolana ante quien sería su verdugo en los próximos quince
años: Hugo Rafael Chávez Frías.
Podemos
decir que desde entonces la oposición ha sido un manojo de errores, de
incongruencias, unidos siempre para enfrentar a Hugo Chávez, pero no unidos
para presentarse al país como una alternativa de poder viable y deseable. Lo
ocurrido en 2002 cuando se llevó a cabo el golpe de estado contra Chávez, ha
sido quizás el momento de mayor desastre opositor, pero no quedó allí, porque
el paro petrolero del 2003 que tuvo como principales víctimas a los más pobres
en todo el país y luego la negativa de participar en las elecciones
parlamentarias del 2005 entregando la Asamblea en bandeja de plata al
oficialismo, fueron dos garrafales errores de los cuales hoy a diez años de
esos acontecimientos sigue pasándole factura a una oposición con más bajos que
altos, una oposición que solo pudo vivir en estos quince años, dos momentos si
se quiere estelares, en 2008 cuando logra recuperar las gobernaciones de
Miranda, Carabobo y Táchira y de la Alcaldía Metropolitana de Caracas y en 2010
cuando alcanza un 52% de los votos para la Asamblea Nacional logrando 67
diputados mientras el oficialismo con 48% logra 98, todo esto motivado a un
reordenamiento de las circunscripciones electorales que efectuó el Consejo
Nacional Electoral para beneficiar abiertamente al gobierno de turno. Aparte de
esos dos momentos la oposición no ha tenido vida, no ha visto luz, no ha dado
"pie con bola" ante un chavismo muy fuerte, no solo por el respaldo
popular sino también por las "ayuditas" que le dan constantemente los
poderes públicos, especialmente el poder electoral y el judicial.
Ante
este panorama la gente que se opone a Chávez, el pueblo opositor, no los
dirigentes, reclaman coherencia en la coyuntura, estrategia en la planificación
de las acciones de sector opositor, UNIDAD UNIDAD UNIDAD, pero no la unidad
solo en eventos electorales, la unidad que haga de la oposición un gran
CONGRESO NACIONAL PARA EL DISEÑO DE UN PLAN DE GOBIERNO, no lineamientos como
los presentó la MUD en 2012, eso es insuficiente y muy general, se requiere de
un gran guion que establezca qué acciones desarrollar para vencer a la
delincuencia, para frenar el desempleo y generar fuentes de trabajo, que dé
respuesta a la continuidad de las acciones sociales emprendidas por el actual gobierno
conocido como "Las Misiones", que establezca planes para el mejoramiento
de la salud, de la educación, de la infraestructura vial y de transporte en general,
un gran plan de cultura, de deportes, en fin un gran proyecto que surja no en
año electoral, sino en el ínterin que le permita a todos los dirigentes recorrer
el país no en la víspera de una elección sino en todo un largo peregrinar en lo
que debe ser el último periodo de gobierno del PSUV.
Lo
lamentable es que esto no se ha dado porque dentro de la oposición hay un
"Caballo de Troya" que dispara contra los lideres, contra los
dirigentes y divide las opiniones de los militantes y seguidores, este "Caballo de Troya" es el que en lugar de defender y apoyar una tesis para fortalecerla, se
convierte en un obstáculo constante y en un estímulo interno negativo que hace más
daño que el que viene desde la acera de enfrente, desde el ala contraria. Y eso
no es nuevo, en 2004 hubo gente de oposición que no apoyó la realización del referéndum
revocatorio que se solicitó, también hubo gente de "Oposición" que en
2002 se cuadraron con el gobierno para dejar al descubierto el movimiento
militar que surgía de las FAN, que en 2005 impulsô una deserción de la Asamblea Nacional al negarse a
participar, y gente que también se opuso a esto de manera decidida. Y ese
sector que el oficialismo llama la "Ultra derecha" ahora pretende
sabotear el que quizás sea el último intento por convertir a la oposición en
gobierno, al sembrar la semilla de la división culpando al venezolano que ha
obtenido en la historia de Venezuela la votación mas alta, luego de Hugo Chávez,
al señor Henrique Capriles Radonski quien con esos 6 millones 500 mil sufragios
se le paró al gobierno para demostrarle con hechos y no solo con palabras que
hay una oposición que crece, una oposición dura que no les permitirâ mas
abusos.
Para
esos sectores opositores dentro de la oposición, el resultado del 7 de Octubre
no fue suficiente y de inmediato se conocieron los resultados, atacaron a
Capriles, a Primero Justicia, a la Mesa de la Unidad y con ello a toda la oposición
como una corriente definida de pensamiento y de acción, Resultado? se perdieron
las elecciones a gobernador con solo 2 de 23 gobernaciones ganadas por una oposición,
torpedeada desde afuera por el chavismo y desde adentro por esos opositores
radicales que no creen en la llegada al gobierno a través del voto como lo sentenció
Henrique Capriles Radonski.
Esa
oposición dentro de la oposición es la que desea la muerte del presidente Chávez,
es la que desea el peor de los escenarios para intentar pescar en rio revuelto,
esa oposición dentro de la oposición son los que hacen siempre referencia a la
desobediencia echândole mano al Art 350 de la constitución nacional, esa
que se alegran con cada cosa mala que pasa en el país, pues creen que es beneficiosa
para sus intenciones, y que aún peor, ha estado detrás de posiciones tan
aberrantes como letales como las de Williams Ojeda, Hernán Escarrâ, y ahora de Hernán
Núñez, porque esos opositores dentro de la oposición piensan que hay dos enemigos, el
externo Hugo Chávez y el interno Henrique Capriles.-
Lo
triste de todo esto es que los voceros del oficialismo y muchos analistas politicos con preferencia de izquierda, a quien siempre tienen
como referencia de la oposición es a esos “opositores radicales” que hoy día ya
están sacando la cara y poniendo sus nombres, son los Diego, los Pablo, los Ricardo, y dicen llamarse "Sociedad Patriotica". Gracias a Dios es mejor así,
porque no hay peor condición para un ser humano que la de “DORMIR CON EL
ENEMIGO!
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